La mayoría de la gente no se podría mencionar por ejemplo qué pueden tener en común los pasteles, caramelos duros y jabón. En realidad puede sonar un poco extraño, a primera vista podemos no notar nada en común entre ellos, sin embargo, hay un solo enlace, y este es muy simple: Cada uno de ellos contiene un ingrediente crucial llamado ácido esteárico. Puedes encontrar más información sobre el ácido esteárico en Cailà & Parés.
Aunque es posible que no hayas visto antes este nombre, una vez que comiences a buscarlo, encontrarás que este componente se encuentra en muchos de los productos que usamos todos los días, como velas, cremas de afeitar, cosméticos y medicamentos. Pero es en la limpieza de la piel que el ácido esteárico realmente toma un papel protagonista, puesto que es un ingrediente que ayuda perfectamente a tener nuestra piel de una forma saludable.
El ácido esteárico es uno de los muchos ácidos grasos que se producen de forma natural en varias plantas y derivados de animales. Se encuentra en los productos o derivados de cierto tipo de animales. Dentro de los productos en los cuales encontramos este ácido, podemos mencionar tales como sebo, manteca de cacao y grasas vegetales.
Cuando se utiliza en productos cosméticos, el ácido esteárico cumple principalmente la función de un espesante o endurecedor. El ácido esteárico es la sustancia que ayuda a que por ejemplo nuestra barra de jabón pueda mantener por el tiempo la forma con la cual la hemos elaborado, tal como lo hace en otros productos como velas, pasteles al óleo y caramelos duros.
El ácido esteárico como componente limpiador en pieles.
Pero dar la forma es sólo una de las propiedades que el ácido esteárico añade a los productos de limpieza como jabones de barra y jabones líquidos. Podemos decir entonces que funciona como un agente tensioactivo, ya que el ácido esteárico es un poderoso limpiador. Un tensioactivo es un compuesto que ayuda a reducir la tensión superficial del agua, permitiendo que se mezcle con los aceites y la suciedad en la superficie de la piel.
Debido a las propiedades que presenta el ácido esteárico, las partículas del jabón son capaces de unirse a la suciedad y el aceite natural que tenemos en la piel, de esta forma puede permanecer en ella, y además permite que posteriormente sea limpiada.
El ácido esteárico también actúa como un agente emulsionante, lo que significa que une materiales como el aceite y el agua, dos tipos de sustancias que sabemos por experiencia que no pueden estar unidas y que encontramos normalmente separadas. Si no fuera por el ácido esteárico, el limpiador facial podría no mantenerse suave y cremoso, sino que todo lo contrario.
Nuestra vida sería demasiado diferente si actualmente no pudiéramos contar con esta sustancia, la mayor parte de los productos que utilizamos están compuestos por este ácido que además ofrece un gran número de posibilidades y de ventajas.
Recordemos entonces que un excelente limpiador para nuestro rostro, es aquel producto que cuenta con el ácido esteárico.