Exhalando el humo llamado «flujo lateral» del fumador, estaremos metiendo a nuestro cuerpo monóxido de carbono, potente, inodoro, peligroso y mortal, alquitrán y otras toxinas no quemadas, siendo mucho más tóxico para los que la rodean que para que los que fuman o en otras palabras, los fumadores pasivos están más expuestos a los problemas del tabaco en la salud.
Los fumadores pasivos están más expuestos al peligro del humo
Aproximadamente, cuatro mil sustancias químicas son componentes del cigarrillo y de esas tantas, 40 son cancerígenos.
Además del monóxido de carbono identificable en nuestros vehículos, algunos gases de escape están presentes, como la acetona, que se encuentra en los limpiadores de coches, cianuro de hidrógeno, el veneno usado en las cámaras de gas, arsénico, veneno violento, el insecticida DDT, metanol, un combustible para cohetes, alquitrán, nicotina y otras sustancias.
De acuerdo con diversas encuestas y estudios realizados por la medicina preventiva, el humo de segunda mano es más peligroso que el humo principal (absorbido por el fumador) y es que la velocidad de absorción de las sustancias cancerígenas contenidas en la corriente secundaria es 10 veces mayor que en la corriente primaria, aunque se mantiene en alto riesgo.
La quema de cigarrillos conduce a la formación de sustancias nocivas que se propagan en el aire, además de las molestias y el malestar provocado por vivir cerca de un fumador, especialmente el olor y picor en los ojos y la garganta, son mucho más graves los problemas de salud, estos pueden surgir a largo plazo después de la inhalación del humo de segunda mano.
El problema de las mujeres embarazadas que son fumadoras pasivas
En las mujeres embarazadas, el tabaquismo pasivo afecta el proceso natural de desarrollo del feto, que aumenta los nacimientos prematuros y defectos de nacimiento y de corazón.
En los bebés, se incrementa el riesgo de muerte súbita, ya que el niño sigue siendo un tema delicado porque se puede ver afectado por enfermedades pulmonares, enfermedades respiratorias, bronquitis, tos, asma, faringitis, decaimiento y alteraciones en la superficie del diente.
Los adultos están expuestos a los peligros del tabaquismo pasivo
Estos pueden sufrir de asma, bronquitis, aumento de las enfermedades existentes, cáncer de pulmón, ataques al corazón, etc. y es que cada año, 5.000 muertes relacionadas con el tabaquismo pasivo se identifican de las cuales el 60% son de origen cardiovascular.
Para promover la suspensión del consumo de tabaco, las campañas de información difunden ampliamente los males y consecuencias del consumo de tabaco en el cuerpo. Los aumentos sucesivos en el precio de un paquete de cigarrillos y un enfoque en los riesgos relacionados con su uso no han permitido una disminución masiva entre los consumidores más jóvenes.
En cambio y en el 2010, una encuesta revela un incremento del 3% del consumo entre los jóvenes que en 2007, jóvenes de 16 a 19 años fuma un paquete al día.
Aunque el tabaquismo es para ellos un fenómeno de identificación en la sociedad o grupo, por un tercio de los jóvenes de 10 a 14 años, el tabaquismo de los padres puede jugar un papel perjudicial en los incentivos para fumar.